Cabe destacar que las nuevas condiciones de WhatsApp ofrecen una integración total de los datos con Facebook, las cuales deben ser aceptadas para seguir utilizando sus servicios. Si el usuario no está conforme, simplemente se tendrá que buscar una alternativa antes del 8 de febrero de este mismo año.
Este último movimiento se une con el descontento de Facebook hacia Apple por exigir a los desarrolladores que muestren el tipo de información que recopilan de los usuarios con sus aplicaciones a través de las nuevas etiquetas de la App Store.
Este anticiclón de claridad hacia los usuarios está ayudando a que muchos comprendan el peligro que conlleva regalar abiertamente todos sus datos a servicios de terceros, y busquen alternativas que respeten su privacidad.
Desde la creación de Signal, el patrón de usuarios se estableció en personalidades de la vida política o periodistas -entre otros, por la fortaleza y seguridad que esta ofrece frente a las demás opciones actuales, como Elon Musk, quien recomendó esta aplicación, y mismo Edward Snowden, antiguo empleado de la Agencia Central de Inteligencia y de la Agencia de Seguridad Nacional.
Signal, Whatsapp y Telegram: cuáles son las principales diferencias
Uno de los principales aspectos que hacen fuerte a Signal es que no tiene fines de lucro, pues no cobran el uso de la aplicación y tampoco venden la información a terceros.
Asimismo, otra ventaja es que los mensajes están cifrados extremo a extremo, lo que quiere decir que están “blindados” mientras navegan por la web hasta que llegan al destinatario.
Esa característica está también presente en Whatsapp. Sin embargo, los nuevos términos y condiciones que entrarán en vigencia el 8 de febrero, que permite una integración total de los datos con Facebook, generó dudas en los usuarios.
Telegram, por su parte, cuenta con “canales”, con los que se pueden difundir mensajes a un número ilimitado de personas. Son similares a los grupos, con la diferencia de que en estos solo el administrador podrá escribir en el chat.
Además, uno de sus beneficios es que puede abrirse simultáneamente en diferentes dispositivos, a diferencia de WhatsApp que solo puede verse en uno a la vez.
En cambios, una desventaja es que Telegram no permite a sus usuarios poder realizar videoconferencias grupales pese a contar con la opción de videollamadas.
Además, si con anterioridad has utilizado WhatsApp, te toparás con la complicación de trasladar los datos de la aplicación estadounidense a la nueva plataforma.